Muchas veces sucede que cargas más equipaje del estrictamente necesario, desembocando en situaciones de estrés, ejecutando mil formas de cerrar la maleta y, en muchos casos, maldiciendo el peso del bulto mientras viajas. Es por ello que vamos a darte estos consejos para ahorrar espacio en la maleta.
#1 Imprescindible
Haz una lista, a papel y bolígrafo o mediante apps como PackingPro, y cuestiónate la funcionalidad de ciertos elementos antes de empacarlos. Te sorprendería lo ligera que puede llegar a ser una valija cargada con lo estrictamente necesario, especialmente cuando vas a realizar un viaje más aventurero que te tendrá en constante movimiento.
#2 El factor clima
Uno de los elementos más confusos al hacer una maleta es la ropa. Por si hace frío, por si llueve y un largo etcétera. Chequear el clima, temperaturas o posibilidad de lluvia en el destino te ayudará a elegir los atuendos con mayor determinación y ahorrar el espacio que ocupa un abrigo o ese par de botas de agua innecesario.
#3 Lo pesado, por delante
El fondo de toda valija debe albergar los elementos más gruesos tales como toallas o chaquetas, de modo que el espacio sobrante te permita rellenar la maleta de forma más organizada y concienciada. Doblar estos elementos de fondo adecuadamente también aportará mayor espacio y flexibilidad.
#4 Bolsillos ocultos
En toda maleta siempre hay bolsillos o compartimentos más pequeños en diferentes ángulos de la misma. Aprovecharlos para elementos concretos tales como las gafas de sol y su respectiva funda, ropa interior o cámara de fotos siempre significará ganar espacio y, seguramente, evites tener que cerrar con tu trasero la valija.
#5 Espacio para las sorpresas
¿Y si no puedes lucir ropa diferente cada día? ¿Algo de provisiones por si acampas? ¿Medicación para dormir en el tren en el que viajarás durante la tercera semana? A veces, no debes ser tan previsor, deja algo de espacio para souvenirs y autoregalos y, por supuesto, no olvides que encuentras todo lo necesario en cualquier tienda a lo largo del trayecto. Carpe diem.
#6 ¿Electrónica?
Al no ser que seas escritor o viajes por negocios, cargar con mucha electrónica en nuestra equipaje es un error. Se trata de viajar, de desconectar, no de estar atado a las redes sociales que, por otra parte, podrás controlar con tu smartphone, una herramienta que, de por sí, puede organizar tu viaje perfectamente. De modo que deja tu tablet o portatil en casa, lo agradecerás. Y tu maleta, también.
#7 Orden
Mantener ordenado tu equipaje siempre es importante. Llevar un compartimento especial para ropa sucia, una bolsa aparte con el material más imprescindible como billetera o celular y mantener todo bien plegado son buenas opciones porque, como sabes, espacio y orden son sinónimos. Recordarás este consejo si tienes que abandonar pronto el hotel y no tienes tiempo para cerrar bien la maleta
#8 Fiebre mini
Tanto en duty frees como supermercados cercanos puedes comprar botes pequeños de champú, gel o gomina. Esto no sólo te ayudará a superar los a veces estrictos controles aeroportuarios sino que también te hará ganar espacio. Olvida los grandes envases empacados por el mítico "y si..." y piensa en mini.
#9 El efecto cebolla
Existe el mítico truco, especialmente si viajas a un país frío, de vestir varias capas de ropa. Camiseta, suéter, quizás otro suéter y la chaqueta en un conjunto que no sólo nos te ayudarán a liberar la maleta de los elementos más gruesos sino que te asegura llegar abrigado (quizás demasiado) a destino. Sólo para aplicarlo en situaciones desesperadas.
#10 Reutiliza
No cargues dos chaquetas ni cinco pantalones. Procura reducir las prendas grandes lo máximo posible y utilizar una de cada durante toda la travesía, especialmente si se trata de un viaje corto o una escapada. Por cada prenda menos puedes cargar o dejar espacio para otras pertenencias. Al igual que con la ropa, también puedes aplicarlo a las toallas o el calzado.
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