Los guías de museos —voluntarios que sirven de guías y educadores— realmente saben cómo pasear en esos pasillos y galerías donde se exponen objetos artísticos en los museos. Te ofrecemos algunos trucos de su profesión.
1. Pasea sin prisa
Para pasar un buen rato en un museo, los guías recomiendan ser selectivo. "Nuestras visitas guiadas incluyen a lo máximo cinco o siete piezas en 50 minutos", dice Anne Bonowitz, una de las guías en el Museo de Arte de Columbus, Ohio.
Dedícale tiempo a obras en papel y textiles. Estos objetos son delicados y se exponen por unos cuantos meses, y podrían no volverse a exponer por años.
Si vas a ver una exposición especial, al final regresa y pasea por la galería nuevamente, dice Claudia Crable, voluntaria interpretativa en el Detroit Institute of Arts (Instituto de las Artes de Detroit). La segunda vez, ve las obras y no mires las etiquetas. "Podrías ver algunas de las primeras obras desde una nueva perspectiva", dice.
2. Sé más listo que los demás
Compra las entradas con anticipación en internet, para llegar antes a las exposiciones. O bien, hazte socio del museo local. Muchos tienen acuerdos de reciprocidad con otros museos. Podrías tener derecho a entradas gratuitas o descontadas, además de precios especiales para socios en la tienda de regalos o café. Averigua sobre los acuerdos de reciprocidad en la oficina de socios del museo antes de viajar; entonces cerciórate de llevar contigo tu tarjeta de membresía.
Para que no tengas que esperar largas colas, busca otras formas de entrar. Por ejemplo, en el Museo del Louvre en París, el famoso museo de arte está situado adyacente a un centro comercial subterráneo. Este pasaje subterráneo te ahorra unos 45 a 60 minutos de espera en la entrada principal del museo.
El mejor momento de ir es en la semana y por las tardes; los grupos escolares llenan las galerías por las mañanas. Si te ves obligado a visitar a una hora temprana, llega a la hora que se abren las puertas y dirígete directamente al punto más lejano de la puerta principal, donde las galerías estarán vacías. O, si eres noctámbulo, investiga el horario de las tardes. Algunos museos se mantienen abiertos hasta tarde una noche a la semana o mes, y generalmente cuando más se acerca la hora de cerrar, estos se encuentran más despejados.
Cuando necesites usar el servicio, usa el que esté en uno de los pisos superiores. Según los conocedores, los servicios de la planta baja casi siempre se encuentran más atestados.
3. Copia a los conservadores
¿Deseas producir la misma impresión que los museos en tu casa? "No expongas toda tu obra artística a la misma vez", dice Crable. "Una apariencia despejada permite que se destaquen varios objetos valiosos". Alterna las piezas con regularidad para mantener un aspecto fresco todo el año.
Prueba con distintos agrupamientos, dice Larissa Bailiff, catedrática en el Museo de Arte Moderno en Nueva York: "Los conservadores casi siempre prueban hasta que logran el agrupamiento adecuado".
4. Profundiza aún más
Aunque los guías de museos son voluntarios que no reciben un salario, su capacitación puede ser intensiva, y durar hasta dos años. Los guías aprenden lo que hace significativo a cada objeto y cómo describírtelo vívidamente. Aprovecha su educación y sabiduría institucional. Al final de la visita guiada, pídele a tu guía que recomiende otra obra de la colección del museo que "no deberías dejar pasar". Podrías descubrir un tesoro escondido.
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