Para poder lidiar con la vida de responsabilidades y viajes que llevo, nada mejor que el yoga y la meditación; es por eso que hace años que lo practico. Sin embargo, cuando tengo que viajar por trabajo, mantenerme activa, saludable y tranquila, me resulta muy complicado.
Por suerte, el yoga no requiere de mucho equipamiento que ocupe espacio en la maleta y es una de las mejores actividades para mantenerse activa cuando estás fuera de casa. Aquí te paso mis tips para seguir con una rutina de yoga al viajar. Espero que te sirvan tanto como a mí.
#5 Lleva un equipo de yoga que sea práctico para cargar
Si te organizas, puedes disfrutar de tu actividad favorita al igual que lo haces en casa. Asegúrate de llevar en tu maleta una colchoneta que quepa bien en la mochila con la que te moverás para recorrer los nuevos lugares que visitarás.
Así, si te topas con algún punto donde sientas buena energía, podrás hacer un par de posturas y aprovecharla.
#4 Busca un lugar donde den clases en la ciudad que estés visitando
No solo porque podrás practicar yoga en un lindo y propicio ambiente, sino porque conocerás otras formas de practicarlo, podrás relacionarte con gente que tiene la misma pasión que tú e, incluso, conocerás nuevos maestros. ¡Aprovecha!
#3 No tengas vergüenza de practicar yoga en lugares públicos
Principalmente en el avión o en esas largas esperas en los aeropuertos. Si no quieres practicar en el suelo, practica la postura del árbol o del bailarín para darle balance a tu cadera.
También puedes hacer tus ejercicios de respiración donde quiera que estés.
#2 Lleva contigo tu música de meditación
Nada me hace sentir más en casa que mi música de meditación. Recuerda llevar en tu dispositivo toda la música que escuchas para practicar yoga y para estar calmada. La necesitarás mucho en el avión y los demás medios de transporte para llenarte de energía cuando el alma está viajando tanto y demorando en llegar a tu cuerpo.
#1 No te sientas culpable si no puedes practicar un día
Mi maestra de yoga siempre dice que la actitud de agradecimiento es el mejor yoga. Si no puedes practicarlo un día porque el viaje estuvo complicado, no te sientas culpable. Dale a tu alma y cuerpo la energía positiva y de balance que necesita agradeciéndole al universo que estás en un nuevo lugar. Repite en tu mente muchas veces gracias, gracias, gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario